La orientación familiar se dirige a las familias que se encuentran con preocupaciones  o conflictos específicos en la relación con sus hijos. Esta orientación puede realizarse a través de distintas vías.

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• De manera particular para cada familia, a través del servicio de  Valoración y orientación a Jóvenes y Familias (enlace),se comienza por analizar con los implicados  la situación que preocupa. Esto incluye precisar aspectos como, desde cuándo se presentan las situaciones motivo de preocupación,  en qué circunstancias,  las reacciones de los implicados y el significado que cada cual tiene sobre lo que ocurre, así como las soluciones que se han intentado para resolverlas.  Con  ello y contando con los  recursos que cada familia tiene, el equipo terapéutico hará una propuesta  para que puedan modificarse aquellas  pautas de interacción que  mantienen bloqueadas las soluciones posibles.

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• De manera grupal, a través de Grupos de sensibilización y crecimiento personal (enlace a la web, dentro del apartado de intervención en el ámbito escolar y social, a grupos de crecimiento personal para padres y jóvenes), en los que a partir de las experiencias de los participantes, se propondrán diferentes técnicas grupales. El objetivo es  abordar las cuestiones que incomodan, preocupan o suponen una dificultad en el ejercicio de la maternidad y la paternidad en un clima de confianza y creatividad. Nuestra experiencia nos muestra que con ello se facilitan los procesos de cambio, pues se adquieren o mejoran  los instrumentos para ejercer las funciones parentales: tanto para el análisis de las situaciones, como para la búsqueda de posibles soluciones.